Tarta de peras y jengibre

Esta tarta es bien sencilla de preparar, muy vistosa, fresca y rica. Los ingredientes son sencillos, y no se tarda mucho en hacerla, así que es una buena opción para los que no os gusta mucho entretenerse en la cocina, pero comer bien y bueno.  Yo la hice para el desayuno, y mi marido la disfrutó de lo lindo 🙂 A los que no os gusta el jengibre, podéis sustituirlo por la canela o vainilla.

Ingredientes:

• 175 g de harina
• 175 g de mantequilla
• 175 g de azúcar
• 3 huevos
• media cucharilla de jengibre fresco rallado
• una pizca de jengibre en polvo
• 2 peras

Trabajamos la mantequilla ablandada con el azúcar hasta conseguir una crema. A continuación añadimos los huevos uno por uno, seguimos batiendo. Ponemos el jengibre, mezclamos y por último añadimos la harina tamizada.

Preparamos el molde (yo he utilizado uno desmontable y redondo), lo untamos bien de aceite o mantequilla. Volcamos la masa dentro del molde, aplanamos un poco.

Pelamos las peras y las cortamos en gajos no muy gruesos. Los colocamos por encima de la masa mirando desde el centro hacía fuera.

Horneamos la tarta a 180ºC durante unos 40 minutos. El tiempo de la cocción depende de lo maduras que sean las peras, o de la variedad que utilcéis, ya que cuanto más líquido tenga, más tiempo tardará en hacerse la masa. Yo he usado las Conference y la tarta se ha horneado durante 40 minutos. Pinchad con un palillo en el centro de la tarta para saber si está hecha o no. 5 o 10 minutos antes de sacarla del horno podéis espolvorearla con un poco de azúcar para que se caramelice un poco y le dé un aspecto más apetitoso.

Sacamos la tarta, la dejamos enfriar un poco, las desmoldamos y la servimos. Templada está muy buena servida con un poco de nata o crema fresca, pero fría está riquísima también.